A quién imitas?

Promueven a alguien en tu trabajo y te preguntas por qué no fuiste tú y cómo hacer para que a ti también te asciendan.
Alguien tiene una idea original y quieres inventar una mejor.
Una chica se corta y pinta el cabello de rubio y en cuestión de días toooodas andan rubias, al siguiente ella vuelve a ser castaña y de nuevo todas a ser castañas.
Un hombre estrena auto y el otro quiere nuevo también.
“Todos” tienen novio(a) y te urge conseguir uno para ti. Una pareja termina y crees que tú también necesitas “libertad y tu espacio”.
Si alguien redecora su casa a ti también te urge un arreglo rápido en la tuya.
A un niño le compran un nuevo juguete y de repente el otro se da cuenta que los que tiene le son insuficientes.
Ves un bebé y se te antoja tener bebé. Es como el juego de “Simón dice…. algo y todos hacen ese algo”

Pudiera escribir mil ejemplos, es algo común, sí y también es de humanos.

La pregunta que hoy me planteo es por qué no se copiar todo, por qué nada más lo superficial? por qué sólo lo que se puede comprar? o lo que sirve para aparentar? para parecer algo o demostrar algo?
Cuando nos demos cuenta de que Dios nos hizo individuos especiales, únicos y que cada quien tiene “lo suyo” comenzaremos a ser agradecidos por lo nuestro, a tener contentamiento y a dejar de imitar lo que hagan o dejen de hacer “los demás”.

Sólo UNO es digno de imitar y no es tu familiar, amigo, compañero de trabajo o vecino… en ese me quiero fijar e imitar.