Reyna Orozco: Día 23. Reto de 30 días para esposas

Col 4:6ª. Que vuestra conversación sea siempre con gracia, sazonada como con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada persona. LBLA

Ya se está acercando al final de estos treinta días.

Un recordatorio sobre lo que te has comprometido a hacer hasta aquí: “No puede decir nada negativo sobre tu esposo. a tu esposo. ni a ninguna otra persona sobre u esposo.” Cada día, di algo que admires o aprecies sobre tu esposo, a tu esposo y a alguien más sobre tu esposo.

“Muéstrate en todo como ejemplo de buenas obras..” (Tito 2:7ª muéstrate en todo como ejemplo de buenas obras, con pureza de doctrina, con dignidad LBLA).

●¿Te parece demasiado trabajo este reto de 30 días o será que se está convirtiendo en un ejercicio de semejanza a Cristo en tu hogar? Solo estamos comenzando a ver las diversas maneras que hay para exhortar o animar a tu esposo.

●¿Es tu esposo organizado? ●¿Es diligente? ●¿Es persistente? Todas estas cosas son parte de un patrón de disciplinas que son dignas de elogio. Afírmalo si ves estas cualidades en él.

Algunos hombres no han desarrollado estas cualidades porque son más espontáneos en su naturaleza. ¡Alaba su espontaneidad! Quizás Dios te ha llamado a su lado para que lo ayudes con estas disciplinas que él aún no ha adquirido –pero la queja no será una forma de hacerlo. Ayúdalo a organizarse.

Cualquiera que sea la necesidad, tú podrás ser la animadora o porrista de tu esposo, animándole cuando desee darse por vencido.

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