Comentando Génesis 39

39. Por mi mente pasan muchas escenas cuando leo esto…e imagino…José era guapo, llamativo, buen físico, se ganó la confianza de su jefe, administraba todo bien, es descrito con tantas cualidades que piensa uno en superman. (La foto es broma), era simplemente un ser “exitoso” pero … le faltó PRUDENCIA, ASTUCIA, o mejor dicho quizá se sintió muy “valiente” para pensar que podía resistir la tentación y se posicionó “demasiado en la orilla”.

¹¹ Un día, en un momento en que todo el personal de servicio se encontraba ausente, José entró en la casa para cumplir con sus responsabilidades.¹² Entonces la mujer de Potifar lo agarró del manto y le rogó: «¡Acuéstate conmigo!» 

Por qué fue cuando NADIE ESTABA AHÍ? A cumplir sus responsabilidades? Navegó con bandera de trabajador responsable, pero parece que se sintió muy seguro y quiso estar cerca del fuego y podría no quemarse… gracias a su “astucia” la mujer de su jefe le quitó sus ropas, su cobertura y por él haberse expuesto fue difamado, encarcelado y se prolongó más los planes que Dios tenía para él.

Sí, qué bueno que salió corriendo, que bueno que no cayó, pero para qué se expuso? Pudo haber evitado CORRER si hubiera evitado IR.

Qué pérdida de tiempo, qué sufrir sin razón. Muchas veces y en muchos aspectos de la vida, he pensado que puedo más que las cosas, que quizá con escuchar, hacer o decir ciertas cosas no me va a afectar, que soy fuerte, pero no lo soy. No so mejor que Josué, es por eso que puedo aprender de él. Es ahí cuando he sentido como Josué que el Señor le PROLONGÓ su misericordia, no dice le hizo justicia (porque lo hubieran encarcelado sin razón, claro que tenía razón, digo para que le haya quitado su ropa seguro sí hubo mucha cercanía, tanto que ella quedó BASTANTE enojada cuando él la dejó ahí sola) dice que el Señor “no dejó de mostrarle su amor…”.

Aún y cuando nos hayamos expuesto a peligros, haber estado tan cerca del fuego que nuestro vestido huela a humo… Dios nos puede dar otra oportunidad para comenzar, nos prolonga su amor, oportunidades, misericordia. Y por favor, aunque algo brille, se vea bonito, llamativo, calientito y sabemos que está mal…mantengamos distancia.

Corramos, huyamos, pero más fácil: No nos expongamos a pecar. Que el fuego quede muy…MUY atrás.