Extraordinaria

Hoy fuimos tanto al ginecólogo como con el perinatólogo.

Lo que escuché me llenó de gozo. No que antes no lo hubiera disfrutado, sino que me llenó de alegría que hasta ellos pudieron notarlo.

Me dijo el doctor que el pediatra estaba sorprendido del caso de nuestra bebé. Que definitivamente lo que vio ahí fue algo EXTRAORDINARIO y así lo refirió. Nuestra hija, por sus semanas, por todas las circunstancias que rodearon el fin de mi embarazo, etc… parecía que iba a pasar por diferentes procesos después de nacer, nada apuntaba para que todo saliera tan bien!, su evolución, peso, respiración, en fin, todas sus reacciones fueron MUCHO MEJOR a lo esperado o expectativas médicas.

Recuerdo cómo me sentí cuando escuché la advertencia que una vez fuera de mi la meterían a incubadora inmediatamente y serían lo más probable días lo que ahí pasara… Claro que me sentí triste y lloré pero obviamente le pedí a Dios que me permitiera llevarme a mi hija sana y en brazos, no salir yo y que ella quedara en el hospital en una incubadora. Raúl y yo oramos juntos y me dijo que no permitiéramos que el temor nos tocara, que ella era plan de Dios y que él siempre tenía cuidado de nosotros y planes de bien. Ahora lo podemos comprobar una vez más. Sí tenemos que ser prudentes y tener cuidados diferentes por un tiempo y luego todo volverá a la normalidad.

Al escuchar hoy todo esto, de nuevo, la palabra EXTRAORDINARIO resuena en mi mente.

Sí, todo esto ha sido algo extraordinario, justo como el Autor.

Veo a mi bebé ahora tan pequeña pero tan fuerte, luchadora, victoriosa, seguramente muchas cosas extraordinarias planeadas en el cielo le esperan. Y sonríe mi corazón.

Estamos alegres, agradecidos y sentimos un abrazo celestial al corazón.

Es linda, hermosa, perfecta, su historia comienza a escribirse de una extraordinaria manera.

No aguantaba por compartir esto.

Abrazos.

P.D. Cortesía de la foto por: Pedro Castañeda (Hey Gracias! si no la hubieras tomado no tendría la foto de justo antes de salir del hospital, su último momento en el cunero antes de recogerla y llevárnosla).