Desde que me acuerdo mantuve una libreta cerca de mi. Es lo mejor que he tenido para depositar ideas, citas, gastos, frases, reflexiones, fechas, compromisos, to-do lists, roles de comidas, planes, sueños, garabatos, dibujitos, caligrafía, en fin, toda serie de ideas y todo lo imaginable de poner en un pequeño cuaderno.
Ahora viviendo en una casa de 2 pisos y con 2 hijos, 1 libreta no es suficiente. ¿Qué sucede si estoy abajo cargando a la pequeña o cocinando y olvidé la libreta arriba? Esto sucede: se extravían ideas, temas, proyectos. ¿Qué sucede si estoy arriba dándole medicina a “la una”, mientras “el otro” se pone pijama? como imaginarás no bajaré y otros conceptos se evaporarán por los aires sin ser escritos jamás.
También sucede que si olvido “La libreta” en la casa mientras espero quizá 30 minutos a JR (si es mucha la tarea que debe copiar del pizarrón ) perderé 30 preciosos minutos “libres” para escribir mientras estoy en el auto y RG asegurada en su sillita.
Así que tengo la solución: Ya no será “La libreta” lo que tenga, sino “Las libretas”. Hoy mismo colocaré una libreta y un bolígrafo en cada área de la casa, también en el auto y en mi bolsa.
El celular ha sido mi libreta por mucho tiempo pero últimamente como que las teclas se atoran, no, no es por el uso (es por que 4 pequeñas manitas lo han usado bastante).
Todo cambio requiere adaptación y toda adaptación requiere más cambios. Al menos este es un punto fácil de solucionar.
Te animo a mantener una libreta cerca de ti, la inspiración muchas veces llega pero se va volando al no saber donde reposar.
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