* Sin lugar a dudas lo mejor de la semana fue el sushi, mole y elotes que mi mamá me proveyó como a pequeño pajarillo.
Tu bebé tiene el tamaño de un repollo (col),
*Espero que huela más bonito que la col jaja.
mide un poco más de 15 pulgadas y media (alrededor de 39 centímetros) y ahora pesa casi 3 libras (unos 1,4 kilos). Está flotando en casi medio litro de líquido amniótico, pero ese volumen disminuirá a medida que crezca y ocupe todo el útero. Ahora puede distinguir entre la luz y la oscuridad, ¡e incluso puede seguir con sus ojitos una luz que se mueve! Cuando nazca, mantendrá los ojos cerrados la mayor parte del tiempo, pero cuando los abra, responderán a los cambios de luz. Sin embargo, sólo podrá ver las cosas que tenga a unas pulgadas o centímetros de su rostro. Pero no te preocupes, porque cuando lo tengas en brazos, ¡a ti te verá perfectamente!
Tu cuerpo esta semana
PARA SENTIRTE MEJOR
Trucos contra la torpeza
Ya no tienes la misma agilidad que antes y por eso has de tener un poquito más de cuidado para evitar resbalones y caídas.*definitivamente NO tengo agilidad ya, hasta para pasar de un lado al otro del auto duro mucho.
• Sube las escaleras despacio y camina con cuidado si el suelo está resbaloso. Agárrate de barandillas siempre que sea posible.
• Camina despacio y sujétate de algo cuando entres y salgas de la tina o la ducha.
• Lleva zapatos con poco tacón y con suela de goma. Los zapatos atléticos que puedes calzarte sin tener que agacharte para atarlos son una buena opción.
• No corras para agarrar el autobús o el tren. Date un tiempito extra para llegar antes o bien espera al siguiente.
• No intentes subirte en una escalera o pararte en una silla para cambiar una bombilla. Es mejor pedirle a alguien que te eche una mano. *pedir pedir pedir… eso no me gusta tanto de esta condición.
Cómo sobrellevar la torpeza y los cambios de humor
Puede que te sientas un poco cansada estos días, *poco?! especialmente si tienes problemas para dormir. *las noches son eternas, eternas de verdad, casi no he dormido nada, es la peor! semana respecto a dormir, la peor. Cuento el tiempo y cuando veo el reloj apenas la 1, apenas las 2, apenas las 4….ouch.
Quizás también te sientas torpe, lo que es perfectamente normal. No solamente tienes ahora mucho más peso, sino que ese peso extra está afectando tu capacidad de mantener el equilibrio, y por si fuera poco, tus articulaciones están más flojas debido a las hormonas del embarazo.*eso explica mucho también.
¿Recuerdas esos cambios de humor que tuviste al principio del embarazo? Ahora la combinación de las molestias de este trimestre con los cambios hormonales te pueden hacer sentir de nuevo los altibajos emocionales de los primeros meses. *eso explica mucho, mucho mucho. De verdad que es demasiado jeje. Me concentro a pensar que es hormonal, hormonal, hormonal y pasará.
Además, es posible que ahora tengas más preocupaciones sobre cómo será el parto, que cada vez está más cerca, y sobre si serás una buena mamá o no. Aunque todo esto es normal, si sientes que cada vez estás más triste o irritable, habla con tu doctor o comadrona. Podrías estar entre el 10 por ciento de mujeres embarazadas que sufren depresión en la última parte del embarazo. *me pregunto mucho dónde y cómo estaré (si sabes a lo que me refiero) y como soy realista y calculadora, tengo idea de lo que me espera.
¿Tus síntomas son diferentes a éstos? Aquí encontrarás información sobre otros síntomas del embarazo.
Consulta de parejas
Tres formas simples de hacer que tu relación se fortalezca
El embarazo es un proceso maravilloso de creación. Sin embargo tanto este periodo como el nacimiento del bebé despiertan emociones muy intensas, que pueden causar cierta tensión. Es más, unos investigadores de la Universidad de Washington, en Seattle, hallaron que dos de cada tres parejas afirman que su relación pasó por momentos de crisis tras el nacimiento de su primer hijo.
La psicóloga Ana Nogales, autora del libro Amor, intimidad y sexo, que aconseja a las parejas latinas cómo llevar bien su relación, advierte que el papá puede sentirse relegado durante el embarazo y aún más con la llegada del bebé. "Es indudable que un recién nacido requiere muchísima atención y que la dinámica de la relación de pareja va a cambiar. Sin embargo, si bien no va a ser la misma de antes, puede ser muy enriquecedora", comenta Nogales. La reconocida psicóloga aconseja lo siguiente:
1. Conversen mucho. Cuando una mujer está embarazada por primera vez, puede sentir cierta inseguridad sobre cómo se desempeñará en su nuevo rol de madre, mientras que el hombre puede sentir la presión de una nueva responsabilidad que antes no tenía. "Estos temores son absolutamente normales", dice Nogales, "pero en nuestra cultura a veces se hace difícil admitirlos porque, por un lado, se considera la maternidad como la experiencia culminante de una mujer y, por el otro, se considera que el papá ha de ser fuerte y guiar a la familia. Sin embargo, mantener abierta la puerta de la comunicación es esencial para el bienestar de la pareja y del bebé". Invita a tu pareja a expresar sus emociones y comparte las tuyas con él. *:!
2. Reconozcan sus sentimientos. Tras el nacimiento del bebé, todo cambia en el funcionamiento de una pareja: horarios, necesidades, prioridades. Nogales advierte que es esencial reconocer que, además de la enorme felicidad de ser padres, también pueden albergar emociones conflictivas, como frustración por no poder hacer las cosas que antes hacían, y resentimiento porque las necesidades del bebé están ahora por encima de las necesidades de la pareja. "Los que toman conciencia de lo que les está pasando, pueden educar sus emociones y ajustar su conducta", afirma Nogales.
3. Tomen decisiones juntos. Nogales advierte que, aunque está claro que el bebé es la prioridad, "es importante no relegar la pareja, ya que está en un momento crítico que debilita el vínculo conyugal". Algo que puede ayudar mucho, dice la psicóloga, es tomar juntos las decisiones sobre los cambios que la nueva situación familiar pueda requerir. Por ejemplo, si es preciso dejar temporalmente unas clases, o cambiar el horario de trabajo para poder atender al bebé, hablen de ello entre los dos antes de tomar una decisión. "Si una persona decide todos los cambios", comenta Nogales, "puede creer que está haciendo todo el esfuerzo sola, mientras que la otra persona puede resentirse si piensa que no se ha tenido en cuenta su opinión".
¿Me estoy volviendo loca?
No te preocupes: si pierdes las llaves todo el tiempo, se te olvidan las citas o no puedes recordar lo que te acaban de decir, no te está pasando nada, es todo por el embarazo. *todo por eso, bueno al menos se puede pasar la bolita a esto jeje.
Faltan 10 semanas ó 70 días para el parto
¿Cómo está mi bebé?
Tu bebé tiene 28 semanas de vida, mide 40 cm. (16 pulg.) y pesa alrededor de 1.200 gramos (2.6 lbs.).
Su cerebro ha crecido y se acomoda al tamaño de la cabeza.
Sus pulmones continúan madurando y produciendo surfactante, imprescindible para que al nacer pueda respirar por sí solo.
Suele jugar con el cordón umbilical, ¡como si fuera una cuerda para saltar!. Además ya comienza a buscar la posición definitiva que tendrá al nacer. La mayoría de los bebés se ubican con la cabeza hacia abajo, pero algunos deciden no hacerlo, ya sea porque se acuerdan tarde de girar y el útero ya no lo permite, o bien porque se hallan enredados con el cordón umbilical o el mismo resulta corto, limitando su movilidad.
¿Qué me sucede esta semana?
Como la cabeza de tu bebé está buscando su posición definitiva sobre el pubis, esto incrementa sus movimientos y en consecuencia tus molestias, dolor y presión sobre el pubis acompañados con contracciones.
La presión de la cabecita del bebé en la vejiga puede provocar también molestias urinarias o una necesidad imperiosa de orinar en los momentos menos oportunos. Incluso a veces pueden escaparse chorritos de orina al reírte, estornudar o toser.
Es bueno realizar los ejercicios para los músculos del piso pelviano, llamados ejercicios de Kegel, que también te ayudarán para el momento del parto y el postparto.