Maestra de corazón

Debo confesar que me gustan los 15 de mayo (día del maestro en México) y que de una extraña, misteriosa y quizá hasta “atrevida” manera me siento “aludida” o “festejada”.

Probablemente te suene “pretencioso o iluso”, pero este año 2012 he decidido comenzar a celebrarme oficialmente. Esta auto celebración te puede sonar bastante ridícula/osada si me conoces o si te cuento y consideras que NO poseo un título que me certifique para ser maestra (legalmente sólo soy IIS: Ingeniero Industrial y de Sistemas). Pero no me juzgues todavía…tengo buenas razones para celebrar.

¿Por qué celebro el día del maestro como mío y por qué quiero seguir haciéndolo? Porque estoy segura de que en mi interior, en el corazón, fui diseñada como maestra. Sí, creo que entre las cosas que Dios me regaló en su diseño original está el deseo y la intención de enseñar.

En una ocasión leí una frase en inglés que decía: “Teachers teach from their hearts, not from their books” (los maestros enseñan desde su corazón, no desde sus libros”) y ciertamente algo de la frase hizo “click” dentro de mi. Seguramente los maestros usarán libros para mostrar datos pero su motivación e intenciones nacen desde adentro.

Los maestros me inspiran. Muchos maestros son admirables, estoy grandemente agradecida con ellos por lo que han invertido y siguen depositando en mi vida. Hay frases, tiempo y detalles que me marcaron por siempre. Algo los caracteriza y no es un título… es la pasión, determinación, intención y enfoque al enseñar.

Puedes enseñar muchos datos, pero un dato transmitido sin pasión es probable que morirá pronto. Puedes enseñar con mucha pasión pero cosas vanas y sin sentido y eso tampoco es honorable. Cuando pasión y verdad se unen generas maravillas.

Una causa puede vivir por siempre como una flama brillante y ardiendo que pasa una generación a otra, una antorcha, un legado, una misión.

Hoy celebro porque quiero tomar esa antorcha y quiero iluminar la vida de mis hijos…

• No tengo un título de maestra, pero tengo la intensión y pasión de serlo cada día.
• No tengo un aula, pero mi casa es el centro de entrenamiento y el mundo entero nuestro salón de clases donde aprendemos y tomamos exámenes diarios.
• No tengo un salario, pero ver los resultados a tanto esfuerzo me paga muy bien.
• No tengo “prestaciones”, pero estos 2 hijos son el mejor préstamo que he recibido.
• No tengo un calendario escolar, pero tengo lo que de vida me reste para enseñar.
• No tengo tantos alumnos, pero por lo pronto en estos 2 hijos míos me puedo enfocar.
• No tengo vacaciones, días de asueto o faltas por enfermedad, trabajo tiempo completo y disfruto con ellos los 365 días del año.
• No tengo un director ante el cual rendir cuentas, es Dios quien me dirige, monitorea, galardona y premia mi trabajo y esfuerzo.
• Mi reforma educativa es: acudir diariamente al Maestro de maestros, basarme en los principios de vida Bíblicos y enseñar con el ejemplo.
• Mi fondo de retiro es terminar esta carrera con la consciencia tranquila de que hice todo lo que estuvo en mis manos por mostrarles el amor de Dios, mi amor y que comprendan cual es su propósito y misión de vida.
• Espero mi jubilación no llegue hasta que muera, ya que siempre hay algo que poder aprender y algo que poder enseñar.

Hoy ESTOY AGRADECIDA…

• Hoy agradezco a todos los maestros CON y SIN título que han invertido en mi vida, por sus enseñanzas, su ejemplo, su esfuerzo y su pasión
• Hoy agradezco a los que han sido también maestros de los que me rodean, de los que han invertido tiempo, dinero, fuerza y voluntad para generar un mejor entorno para todos
• Hoy agradezco a todos los maestros que saben que cada día es una oportunidad única, toman en serio su trabajo y se comprometen con su labor.
• Hoy agradezco a Dios y celebro ser la maestra de vida de estos 2 extraordinarios, únicos e incomparables alumnos, JR y RG, gracias a él por todos los que han sembrado bendición en sus vidas…

…Sí, hoy celebro ser maestra, maestra de corazón ♥.

*Foto tomada el 13 de abril del 2012 en un “picnic educativo”.