En qué momento te imaginarías que lo que alguno de tus enemigos desea para ti… será el fin que él tendrá?! acaso no es eso sorprendente?
Amán deseaba para Mardoqueo una muerte de horca y él terminó en la misma horca que mandó levantar para alguien más.
Qué tenemos en nuestro corazón por los demás? Buenos deseos?, buena actitud? nos alegramos con sus éxitos, alegrías, con sus victorias?
O por el contrario no podemos ver a nadie feliz porque nos corroe la envidia? le deseamos desgracia? muerte? enfermedad? angustia? escases? Es triste pero podríamos terminar como deseamos ver a alguien más.
Cuidemos nuestro corazón, nuestros deseos y mantengamos una actitud saludable respecto a los demás.
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