Días extremos…

Estos últimos 3 días… horas…han sido… llenos de adrenalina, incertidumbre, emociones fuertes, dolor, lágrimas, oraciones, en fin… cómo definirlo? EXTREMOS. Es poco pero se ha sentido largo…

No sé cómo definir todo lo que he pasado o sentido. La hemorragia que tuve fue bastante grande, me puso mal.

Ha sido duro.

Los hospitales no son algo muy agradable que digamos… fue muy diferente mi visita del día 20 (que salí con una princesa en brazos!) a esta visita… angustiante, dolorosa…laaaaaarga pero al final alegre pues estoy bien.

Tuve una regresión de cuando tuve el shock hipovolemico por la pérdida de sangre, por poco pierdo el conocimiento, comencé sintiéndome débil, viendo bolitas, luego gris y luego dejé de ver…no podía respirar… lo que ha de haber pasado Raúl conmigo al verme así ha de haber sido muy doloroso y duro para él, pero fue fuerte, actuó y decidió rápido a pesar de mi deseo de postergar todo hasta el límite de las 4 que teníamos.

Gracias a Dios tuve el apoyo, ayuda y atención de familia y doctores. Sobre todo la atención, amabilidad, disposición y profesionalismo de mi ginecólogo (siempre lo recomiendo ampliamente), qué bendición conocer y contar con la ayuda de un médico, honesto, íntegro y tan humano y cristiano como él!

Estoy bien, de nuevo, me siento algo débil pero mucho mejor después de las trasfusiones sanguíneas, todo obra para bien.

De todos los diagnósticos que pudieron haber pasado, de los panoramas tan feos que me plantearon como posibilidades sucedió el menos peor.

No podía imaginar cómo sería volver a ser intervenida y otros 12? o no sé cuántos días para recuperarme…

Extrañé (bueno, los 2 extrañamos) tanto a los pequeños… mi mayor y mi pequeña…ay…

Estoy agradecida con todos los que nos ayudaron a superar estos días.

Estoy de regreso.

La hemorragia ha cesado y espero continúe así, sólo mejorando.

Espero valorar esta oportunidad.

Debo cuidarme, ser agradecida y no olvidar lo que pasó estos días.

Estoy feliz de volver, abrazar a mi amado, a mi pequeño gigante y a mi mini paquetito de ternura.

La vida es frágil, el cuerpo es frágil. Por favor no lo olvides y no pierdas el día de hoy renegando, llorando o peleando con seres queridos.

Tienes vida, hay oportunidad.

Te quiero.