Cuando lo que necesito es PERDER

Vivimos en  una cultura donde todo mundo quiere ganar.

Ganar partidos, medallas, peleas, discusiones, debates, encuestas, puntos, seguidores, guerras, competencias, diplomas, trofeos, records, todo tipo de marcadores y posiciones.

También se nos enseña sobre ganar-ganar para que así no existan “perdedores” y todos queden satisfechos.

Ah….Sí!, ganar se siente bien. (amm…bueno, a decir verdad ganar peso no se siente tan bien… eso sí la mayoría quiere perder)

Todo alrededor te “grita” que debes ser un triunfador y que debes enseñar a tus hijos a ser triunfadores también.

El “no ganar” no debería convertirse en el fin del universo de ninguna persona.

Es extraño pero hoy pienso en que a veces…

• Perder a veces será tu mayor victoria.
• Perder y rendirte quizá es lo que más necesitas algunas veces para aprender a no aferrarte a absurdos.
• Perder puede traer a tu vida mucha ganancia.
• Perder puede traer satisfacción a alguien que quizá necesitaba más que tu “ganar”.

He visto a papás que se “dejan ganar” cuando juegan con sus hijos. Esa pérdida los hace sentir bien y a sus hijos también.

He visto personas que “ganan” de una manera corrupta, ilegal, deshonesta, mentirosa y falsa pero ellos se sienten satisfechos con ello. Para ellos el ganar es todo, no importa que sea legítimo.

Ganar, perder…. Perder, ganar.

Hay cosas que definitivamente quiero y necesito perder, si es que quiero ganar lo más importante (y no, no estoy hablando de peso, aunque también me gustaría perderlo!).

Quiero quedarme con esto en mente y espero tú también:

Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá;

y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará.

Mateo 16:24-26

2 versiones en video de la misma canción que habla sobre el perder…y disfruté hoy.