Siempre soñé tener un hijo y ponerle por nombre David. Sería pequeño luego crecería pero yo siempre le diría “mi pequeño David”.
Hoy pensé mucho en él pues no existe.
Hoy pensé mucho en él pues un pequeño David nació hoy. Ya lo conocí por foto. Lo quisimos y esperamos antes de que naciera, incluso antes de saber su sexo o su nombre.
Para sus papás ya es una realidad.
Para mi un recordatorio de que hay algunos sueños que se cumplen y algunos otros a los que hay que renunciar.
Seguramente en su familia también sabrán de eso.
Por extraño que parezca al escribir esta nota no estoy llorando (como muchas otras veces al pensarlo).
Seguro si no sabes mucho al respecto del transfondo de esto te confundirás o podrás malinterpretarlo, seguro con el tiempo lo explicaré mejor.
Hoy sólo quiero recordar y recordarte que toda nuestra vida, planes, sueños y familias están en las manos de Dios, podemos imaginar, suponer y tratar de controlar las cosas, pero hay cosas que simplemente son Acts of God, lo tengo claro como ingeniero, espero también tenerlo claro como mujer y agradecer en medio de todo, con la mejor de las actitudes.
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